Del sitio
Virgen Peregina:
El origen de esta devoción es muy antiguo. Data del siglo XIX. En sus
inicios se comenzaba esta Devoción con una verbena en el Jardín del
Santuario.
¿Porqué 46 rosarios? Es un número simbólico para representar el
número de estrellas impresas en el manto de la imagen de Guadalupe. La
devoción se conserva hasta el día de hoy; como todo encuentro de fe, es
una práctica agradable a Dios y por su medio consta que se han alcanzado
muchos favores.
Esta venerable tradición enlaza el mes de octubre, dedicado al santo
rosario, a partir del día 28, con la fiesta de Santa María de Guadalupe,
12 de diciembre hasta sumar cuarenta y seis rosarios.
El Rosario es la devoción mariana que ha gozado de más preferencias en la piedad
popular y ha sido más recomendada por la Iglesia. Consiste en meditar
veinte episodios o misterios de la vida, pasión y muerte de Cristo
(incluyendo los Misterios Luminosos sugeridos por el Papa Juan Pablo II) relacionados con Santa María, intercalando en cada misterio un
Padre Nuestro y diez Aves Marías. El rosario, además de cultivar,
orientar y alimentar nuestra fe en Cristo nos ayuda a profundizar la
trascendencia del hecho guadalupano y nos permite sentir la presencia
amorosa de Nuestra Madre para su pueblo mexicano.
“El Rosario nos transporta místicamente junto a María, dedicada a
seguir el crecimiento humano de Cristo en la casa de Nazaret. Eso le
permite educarnos y modelarnos con la misma diligencia, hasta que Cristo
“sea formado” plenamente en nosotros (cfr. Gál. 4,19)”. (El Rosario de
la virgen María n. 15)
Como rezarlo:
† Por la Señal de la Santa Cruz † de nuestros enemigos, † líbranos Señor, Dios nuestro.
† En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
ACTO DE CONTRICIÓN:
Señor Jesucristo, que por mi amor quisiste nacer en un pesebre y
morir en la cruz, ¡qué grande ha sido mi deslealtad! ¡qué grande mi
atrevimiento cada vez que he faltado a tu ley de amor! Tú, Señor,
mostrándote misericordioso conmigo te manifiestas Dios, pues en tu ser
infinito cabe infinita bondad. Imploro tu perdón tanto más necesario
cuanto más pecador me confieso.
¡Perdón, Señor mío! Te ofendí y al considerarlo siento gran tristeza,
pero al verte en la cruz, mi confianza renace, por eso, desde el fondo
de mi alma, te digo como el salmista: ¡Apiádate de mi Dios mío según tu
gran misericordia! Amén.
OFRECIMIENTO:
Acuérdate, ¡Oh piadosísima Virgen María!, que jamás se ha oído decir
que ninguno de los que han acudido a tu protección, implorando tu
asistencia y reclamando tu socorro, haya sido desamparado de ti. Animado
por esta confianza, a ti acudo, oh Madre, Virgen de Vírgenes, y
gimiendo bajo el peso de mis pecados me atrevo a comparecer ante tu
presencia soberana. Oh Madre de Dios, no deseches mis súplicas, antes
bien, escúchalas y acógelas benignamente. Amén.
PADRE NUESTRO:
Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu nombre,
venga a nosotros tu reino, hágase tu voluntad, en la tierra como en el
cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como
también nosotros perdonamos a los que nos ofenden. No nos dejes caer en
tentación y líbranos del mal. Amén.
AVE MARÍA:
Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo,
bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu
vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios y Madre nuestra, ruega por
nosotros, los pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.
GLORIA:
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
JACULATORIAS:
V. Mi corazón en amarte eternamente se ocupe.
R. Y mi lengua en alabarte, Madre mía de Guadalupe.
V. San Juan Diego, predilecto de María.
R. Oye benigno mi ruego y sé tú mi protector y guía.
LOS MISTERIOS GOZOSOS: (lunes y sábado).
La Encarnación del Hijo de Dios.
La visita de la Santísima Virgen a su prima santa Isabel.
El nacimiento del Hijo de Dios en Belén.
La presentación del niño Jesús al templo.
El niño Jesús perdido y encontrado en el templo.
LOS MISTERIOS DOLOROSOS: (martes y viernes).
La oración en el huerto de los olivos.
La flagelación del Señor.
La coronación de espinas.
Jesús con la cruz a cuestas.
Jesús muere en la cruz.
LOS MISTERIOS GLORIOSOS: (miércoles y domingo).
La Resurrección del Señor.
La ascensión del Señor a los cielos.
La venida del Espíritu Santo.
La asunción de la Santísima Virgen María a los cielos.
La coronación de la Virgen María como Reina de cielos y tierra.
LOS MISTERIOS LUMINOSOS: (jueves).
El Bautismo de Jesús en el Jordán.
La Autorevelación de Jesús en las Bodas de Caná.
Jesús anuncia el Reino de Dios y nos invita a la conversión.
La transfiguración del Señor.
La institución de la Eucaristía como expresión sacramental del Misterio Pascual.
EN CADA MISTERIO DEL SANTO ROSARIO SE REZA UNA PLEGARIA: Primer
Misterio: Primera Plegaria, Segundo Misterio: Segunda Plegaria, y así
sucesivamente.
PRIMERA PLEGARIA:
Madre nuestra, te suplicamos que en las horas amargas de la vida,
cuando la angustia y la aflicción nos lastimen, sepamos escuchar en lo
íntimo del alma tu voz consoladora, como el dichoso Juan Diego en el
Tepeyac. Concede a quienes contemplamos con fe tu bendita imagen de
Guadalupe gozar por anticipado la felicidad que en la casa del Padre nos
espera, a cambio de lo cual aceptamos sobrellevar con firmeza los
trabajos que Dios nos enviare. Amén.
Rezar: Padre Nuestro – 10 Aves Marías – Gloria al Padre... – Mi corazón en amarte... – San Juan Diego...
SEGUNDA PLEGARIA:
Madre de Dios y Madre nuestra, te pedimos que así como en el Tepeyac
te dignaste salir al encuentro de Juan Diego temeroso y apocado que te
rehuía, te dignes asistirnos con tu presencia materna en el trance de la
muerte y consolarnos en la agonía. De tu valiosa solicitud esperamos la
dicha de contemplar a Dios tal y como es por toda la eternidad. Amén.
Rezar: Padre Nuestro – 10 Aves Marías – Gloria al Padre... – Mi corazón en amarte... – San Juan Diego...
TERCERA PLEGARIA:
Madre de todos los hombres, te suplicamos que así como consolaste a
Juan Diego, abatido por la enfermedad que minaba la salud y fuerza de su
tío, acudas en auxilio nuestro cuantas veces nos apartemos de la virtud
y atentemos contra el amor. Madre Santa, que resuene en nuestros oídos
aquel ¿A dónde vas, hijo mío?, que dijiste a Juan Diego y que al oírlo
dejemos el camino de la mentira, del fraude, la irresponsabilidad y
comencemos de nuevo a servir a Dios Amén.
Rezar: Padre Nuestro – 10 Aves Marías – Gloria al Padre... – Mi corazón en amarte... – San Juan Diego...
CUARTA PLEGARIA:
Madre de los mexicanos, te suplicamos que así como brotaron rosas
frescas y fragantes en el árido Tepeyac y se imprimía tu divina imagen
en la tilma de Juan Diego, te dignes hacer florecer en nuestra alma el
amor para que en ellas te retrates tú, purísima Madre, y podamos esperar
con inquebrantable fe un tránsito feliz de esta vida a la eterna. Amén.
Rezar: Padre Nuestro – 10 Aves Marías – Gloria al Padre... – Mi corazón en amarte... – San Juan Diego...
QUINTA PLEGARIA:
Madre de los mártires, te suplicamos que, así como el neófito Juan
Diego, tu embajador, se sintió tan hondamente solidario ante las
necesidades de sus semejantes, y alcanzó por tu mediación ante Dios la
salud de su afligido tío Juan Bernardino, te dignes alcanzarnos la
gracia de vivir ese espíritu de servicio a los demás como verdaderos
hermanos de Jesús. Amén.
Rezar: Padre Nuestro – 10 Aves Marías – Gloria al Padre... – Mi corazón en amarte... – San Juan Diego...
CONCLUIDOS LOS MISTERIOS, SE REZA LO SIGUIENTE:
V. ¡Oh Soberano santuario, sagrario del Verbo eterno!
R. Libra, Virgen, del infierno, a quienes rezan tu Santo Rosario
V. Emperatriz, poderosa, de los mortales consuelo.
R. Ábrenos, Virgen, el cielo, con una muerte dichosa.
V. Y danos pureza de alma.
R. Tú que eres tan poderosa.
V. Dios te salve María santísima, Estrella de la mañana, faro
resplandeciente que nos conduce al puerto de salvación, luz divina que
ilumina a los bienaventurados. Dios te salve María Santísima, hija de
Dios Padre, virgen purísima y castísima antes del parto, en tus manos
encomendamos nuestra fe para que la ilumines. Llena eres de gracia, el
Señor es contigo, bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es
el fruto de tu vientre, Jesús.
R. Santa María, Madre de Dios y Madre nuestra, ruega por nosotros, los pecadores, ahora, y en la hora de nuestra muerte. Amén.
V. Dios te salve María Santísima, vida de los santos, alegría de los
ángeles, esperanza de los hombres, nube luminosa a cuyo seno bajó el
Hijo de Dios. Dios te salve María Santísima, Madre de Dios Hijo, virgen
purísima en el parto, en tus manos encomendamos nuestra esperanza para
que la alientes. Llena eres de gracia, el Señor es contigo, bendita tú
eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús.
R. Santa María, Madre de Dios y Madre nuestra, ruega por nosotros, los pecadores, ahora, y en la hora de nuestra muerte. Amén.
V. Dios te salve María Santísima, modelo de amor, lirio de pureza,
imagen viva de castidad. Dios te salve María Santísima, esposa de Dios
Espíritu Santo, virgen purísima después del parto, en tus manos
encomendamos nuestra caridad para que la inflames, nuestras necesidades
para que las remedies, nuestras almas para que las salves. Llena eres de
gracia, el Señor es contigo, bendita tú eres entre todas las mujeres y
bendito es el fruto de tu vientre, Jesús.
R. Santa María, Madre de Dios y Madre nuestra, ruega por nosotros, los pecadores, ahora, y en la hora de nuestra muerte. Amén.
Dios te salve María Santísima, océano de gracias, manantial de
misericordia, soberana emperatriz del cielo y de la tierra. Dios te
salve María Santísima, templo, trono y sagrario de la Santísima
Trinidad. Virgen concebida sin la culpa del pecado original.
Dios te salve, Reina y Madre de misericordia, vida y dulzura y esperanza nuestra: Dios te salve. A ti llamamos los desterrados hijos de Eva; a ti suspiramos, gimiendo y llorando en este valle de lágrimas. Ea, pues, Señora abogada nuestra, vuelve a nosotros esos tus ojos
misericordiosos y, después de este destierro, muéstranos a Jesús, fruto
bendito de tu vientre. ¡Oh clementísima! ¡oh piadosa! ¡oh dulce Virgen María!. Ruega por nosotros santa Madre de Dios, para que seamos dignos de
alcanzar las divinas gracias y promesas de nuestro Señor Jesucristo. Amén.
De tus divinos ojos, oh María penden nuestras felicidades ¡Míranos, Señora, y no nos desampares!
LETANÍAS
V. Señor, ten piedad de nosotros
R. Señor, ten piedad de nosotros
V. Cristo, ten piedad de nosotros
R. Cristo, ten piedad de nosotros
V. Señor, ten piedad de nosotros
R. Señor, ten piedad de nosotros
A las siguientes invocaciones vamos a responder: ¡RUEGA POR NOSOTROS!
Santa María.
Hija predilecta del Padre.
Madre del Verbo Encarnado.
Templo del Espíritu Santo.
Virgen purísima, preservada del pecado original.
María, hija fiel de Sión.
María, obediente, pobre y humilde.
María, llena de gracia y de todas las virtudes.
María, discípula perfecta de Cristo.
María, atravesada por la espada del dolor.
María, entregada al apóstol Juan y a todos nosotros.
María, imagen purísima de la iglesia.
Santa María de Guadalupe.
Mujer vestida del sol eterno.
Mujer coronada de Estrellas del cielo.
Mujer con la luna perecedera bajo tus pies.
Estrella de la Evangelización.
Madre del verdadero Dios por quien se vive.
Madre, tú que amparaste a Juan Diego y a los más pequeños.
Madre, tú que amparas a los indígenas, campesinos y obreros.
Madre, tú que amparas a los niños maltratados y abandonados.
Madre, tú que amparas a los enfermos, ancianos y presos.
Madre, tú que amparas la vida del niño no nacido.
Virgen, tú que comunicas el amor a la castidad y pureza.
Virgen, tú que comunicas la búsqueda de silencio y meditación.
Virgen, tú que comunicas el celo apostólico por una nueva Evangelización.
María, Reina del cielo y de todo el universo.
María, Reina de América.
Reina, tú que nos pides el respeto a toda vida humana.
Reina, tú que nos pides la obediencia a los derechos humanos.
Reina, tú que nos pides la real protección de los derechos humanos.
Reina, tú que nos pides la consagración a tu Corazón inmaculado.
Reina, tú que nos pides el rezo diario del santo rosario.
Reina, tú que comunicas la caridad con tus hermanos más indigentes.
Reina, tú que comunicas el deseo de la entrega total a Cristo y a su Iglesia.
Reina, tú que comunicas la superación de nuestros instintos egoístas.
Reina, tú que nos pides la reparación de tantos crímenes contra la vida del alma y del cuerpo.
Reina, tú que nos pides la solidaridad cristiana con los hermanos más pobres.
María, signo celestial de la caída final del maligno.
María, signo celestial que prepara la última venida de Cristo.
María, signo celestial de victoria sobre las herejías, sectas y el ateísmo.
María, signo celestial de consuelo y esperanza de nosotros peregrinos.
María, signo celestial de nuestra transformación gloriosa.
María, signo celestial de un nuevo cielo y una nueva tierra.
V. Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo
R. Perdónanos, Señor
V. Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo
R. Escúchanos, Señor
V. Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo
R. Ten misericordia de nosotros
ORACIÓN:
Dios misericordioso, que quisiste que tu Hijo unigénito proclamara
desde la cruz como Madre nuestra, a su propia Madre, haz que tu Iglesia,
por la mediación y cooperación maternal de la Virgen María, crezca cada
día en santidad y atraiga a su seno a todas las naciones. Por
Jesucristo nuestro Señor. Amén.
ORACIÓN:
Bajo tu amparo nos acogemos, santa Madre de Dios, no desprecies las
súplicas y oraciones que te hacemos en nuestras necesidades. Antes bien,
líbranos de todos los peligros, oh Virgen gloriosa y bendita. Ruega por
nosotros, Santa Madre de Dios, para que seamos dignos de alcanzar las
divinas gracias y promesas de nuestro Señor Jesucristo. Amén.
CONSAGRACIÓN A MARÍA:
¡Oh señora mía! ¡Oh madre mía! Yo me ofrezco enteramente a ti, y en
prueba de mi filial afecto, te consagro en este día, y pasa siempre, mis
ojos, mis oídos, mi lengua, mi corazón; en una palabra todo mi ser. Ya
que soy todo tuyo, ¡oh madre de bondad!, guárdame y defiéndeme como
instrumento y posesión tuya. Amén.
ORACION FINAL:
Reina y Madre de los mexicanos:
Atraídos por el encanto de tu ternura maternal y tu solicitud hacia
nosotros, venimos a consagrarte nuestras alegrías, penas, sacrificios,
angustias y dolores.
Porque eres para todos los mexicanos una Madre que nos escucha, consuela y atiende nuestras necesidades.
Eres alivio en el dolor, luz que ahuyente nuestros temores; nos acoges siempre como a pequeñitos y delicados.
Nos consagramos totalmente a ti, y en ti depositamos nuestra confianza.
¡Santa María de Guadalupe, Reina de México, conserva nuestra fe y salva nuestra patria!
ESTOS SON LOS NOMBRES DE LAS 46 ESTRELLAS:
28 octubre – Estrella.- MARAVILLOSA
29 octubre- Estrella.- ALEGRE
30 octubre- Estrella.- BELLA
31 octubre – Estrella.- SIEMPRE VIRGEN0
1 noviembre – Estrella.- EVANGELIZADORA
02 noviembre – Estrella.- COMPASIVA
03 noviembre – Estrella.- MADRE NUESTRA
04 noviembre – Estrella.- SEÑORA NUESTRA
05 noviembre- Estrella.- MENSAJERA
06 noviembre- Estrella.- PACIENTE
07 noviembre- Estrella.- HUMILDE
08 noviembre- Estrella.- PROMOTORA
09 noviembre- Estrella.- COMPROMETIDA
10 noviembre- Estrella.- FIEL
11 noviembre- Estrella.- MADRE DE CRISTO
12 noviembre- Estrella.- PODEROSA
13 noviembre- Estrella.- DOLOROSA
14 noviembre- Estrella.- AGRADECIDA
15 noviembre- Estrella.- REINA DE LA ESPERANZA
16 noviembre- Estrella.- SOLIDARIA
17 noviembre- Estrella.- ACOGEDORA
18 noviembre- Estrella.- EDUCADORA
19 noviembre- Estrella.- BONDADOSA
20 noviembre- Estrella.- CONSOLADORA
21 noviembre- Estrella.- REINA DE LA UNIDAD
22 noviembre- Estrella.- REINA DE LA CONFIANZA
23 noviembre- Estrella.- OBEDIENTE
24 noviembre- Estrella.- RESISTENTE
25 noviembre- Estrella.- RESPETUOSA
26 noviembre- Estrella.- AMADA
27 noviembre- Estrella.- DIALOGANTE
28 noviembre- Estrella.- TESTIGO
29 noviembre- Estrella.- REINA DE LA ALIANZA
30 noviembre- Estrella.- RECONCILIADORA
01 diciembre- Estrella.- SERVIDORA
02 diciembre- Estrella.- GUADALUPE
03 diciembre- Estrella.- MISIONERA
04 diciembre- Estrella.- ADMIRABLE
05 diciembre- Estrella.- LUZ
06 diciembre- Estrella.- CONFORTADORA
07 diciembre- Estrella.- AMABLE
08 diciembre- Estrella.- INMACULADA
09 diciembre- Estrella.- FLOR DE FLORES
10 diciembre- Estrella.- SEÑORA DEL CIELO
11 diciembre- Estrella.- ANIMADORA
12 diciembre- Estrella.- PERFECTA