Jose Kurian ha compartido en Facebook una bella imagen que capta todo lo que hay de bello en nuestra fe. La foto de cinco niñas rezando ante una estatua de María es casi hipnotizante.
Las pequeñas no solo están encantadoras con sus manos en perfecta posición de rezo, sino que también hay una genuina mirada de reverencia en sus rostros; con una mención especial a la que parece ser la niña más joven (la segunda de la izquierda) que está tan concentrada en sus oraciones a tan corta edad.
Algo que llama la atención de la imagen es el tamaño perfecto de la estatua de la Virgen. Como las niñas casi pueden elevarse por encima de ella, se convierte en una figura cercana y accesible.
Es algo que merece la pena tener en cuenta si se desea tener una estatua de María en casa. Mientras que a muchos católicos adultos les atraen las estatuas gigantes de María o Jesús, más grandes que la vida misma, para los niños estas estatuas más pequeñas pueden convertirse en parte de la familia.
Por supuesto, lo que también destaca de la foto es lo importante que es presentar a la Virgen a los niños desde los primeros años, y animarles a rezarle. Pueden sentir el consuelo de que Ella vela por ellos, lo que siempre es reconfortante a cualquier edad.
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